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Cómo sembrar el interés por su vocación desde la secundaria 

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Oriéntate

30 de julio de 2025

La secundaria es una etapa de grandes cambios: personales, sociales y académicos. Es el momento en que las y los adolescentes comienzan a formar su identidad, cuestionan su entorno y, poco a poco, piensan en su futuro. Aunque todavía falta tiempo para elegir carrera, este es un buen momento para sembrar el interés vocacional de forma natural, sin imponer ni presionar. 

Como madre, padre o docente, tienes un papel clave en este proceso. Acompañar desde ahora ayuda a que la futura decisión se tome con más confianza y menos estrés. Aquí te compartimos cómo hacerlo paso a paso. 

¿Por qué empezar en secundaria la orientación vocacional? 

Porque es cuando empiezan a hacerse preguntas como: 

  • ¿Qué quiero ser? 
  • ¿Para qué soy bueno o buena? 
  • ¿Qué me gusta hacer? 

Si bien muchas respuestas aún no están claras, despertar el interés vocacional en esta etapa les permite explorar con libertad, conocerse mejor y tomar decisiones con mayor seguridad cuando llegue el momento. 

1. Escucha sin corregir 

A veces los adultos, con buena intención, corrigen de inmediato cuando un adolescente dice: “Quiero ser artista” o “Quiero trabajar con animales”. Así que, en lugar de corregir, escucha. Pregunta por qué le interesa eso, qué le llama la atención, qué ha investigado. 

Validar sus ideas fortalece su confianza y alimenta el interés vocacional de forma positiva. 

2. Fomenta la curiosidad 

El interés vocacional muchas veces nace de la curiosidad. Por eso, es importante darles oportunidades para descubrir distintas áreas del conocimiento y del mundo laboral: 

  • Llevarlos a conciertos, museos, ferias científicas o exposiciones. 
  • Sugerirles documentales, podcasts o libros según lo que les gusta. 
  • Apoyarlos si quieren inscribirse en talleres extracurriculares. 

No se trata de dirigir su camino, sino de abrir ventanas para que vean lo que hay allá afuera. 

3. Observa sus fortalezas y díselo 

Muchas personas no saben en qué son buenas simplemente porque nunca se lo dijeron. En la secundaria, reconocer fortalezas marca una diferencia enorme. 

Si notas que se expresa bien, que tiene habilidades para resolver problemas, que es creativo, analítico o empático, díselo. Esto puede motivarlo a explorar áreas relacionadas y fortalecer su interés vocacional

4. Comparte experiencias reales 

Los jóvenes valoran mucho lo que es auténtico. Compartir historias reales (tuyas o de personas cercanas) sobre cómo alguien descubrió su vocación, cambió de carrera o enfrentó dudas, puede ser más inspirador que una prueba de orientación vocacional. 

Además, esto ayuda a normalizar que el camino profesional no siempre es lineal. Comprenderlo les da más tranquilidad y libertad para explorar su propio interés vocacional sin miedo a equivocarse. 

5. No pongas presión: ofrece acompañamiento 

Hay una línea muy delgada entre motivar e imponer. Si se sienten obligados a elegir algo “por obligación” o “para complacer”, probablemente se desconecten del proceso. 

El interés vocacional crece mejor en un ambiente de confianza, donde sea fácil expresarse libremente y recibir apoyo sin sentirse evaluados o juzgados. 

Preguntas como “¿Qué has descubierto que te gusta últimamente?” o “¿Hay algo que te gustaría aprender fuera de la escuela?”, abren conversaciones sin presión. 

6. Busca recursos complementarios 

Además de lo que se hace en casa o en el aula, hay muchas herramientas disponibles: 

  • Plataformas con tests gratuitos. 
  • Orientación vocacional en línea. 
  • Charlas o talleres comunitarios. 

Apoyarte en estos recursos refuerza el interés vocacional y hacer el proceso más completo. 

Cambiemos juntos 

Sembrar el interés vocacional desde la secundaria no es empujar a tomar decisiones definitivas, sino acompañar en el descubrimiento. Es mostrar opciones, abrir espacios de conversación, validar lo que sienten y brindar herramientas para que, cuando llegue el momento de elegir, lo hagan con mayor claridad y seguridad. 

Acompañar hoy puede ser la clave para que mañana construyan un futuro con sentido.